La
palabra ética proviene del latín ethĭcus, y este del griego antiguo ἠθικός (êthicos), derivada de êthos, que significa 'carácter' o
'perteneciente al carácter'.
La
ética está vinculada con la moral que rige el obrar correcto. La ética está
marcada por normas que son la base para diferenciar entre el bien y el mal, uno
de los temas filosóficos por excelencia.
Aristóteles define la ética como el estudio del bien moral,
equivalente a la felicidad, y consistente en el ejercicio del entendimiento. La
felicidad es el fin último de todo el actuar humano, y la ética se ocupa del
modo de alcanzarla, que es a través de la bondad y la virtud.
Kant formuló
la ética del deber. Es bueno todo acto que se hace con la conciencia del deber,
sin considerar sus consecuencias. Debemos actuar en base a un imperativo
categórico que nos damos a nosotros mismos, y que pueda valer en todo tiempo y
lugar como mandato universal.
Una
sentencia ética es una declaración moral que elabora afirmaciones y define lo
que es bueno, malo, obligatorio, permitido, etc. en lo referente a una acción o
a una decisión.
Por
lo tanto, cuando alguien aplica una sentencia ética sobre una persona, está
realizando un juicio moral. La ética, pues, estudia la moral y determina cómo
deben actuar los miembros de una sociedad.
La
ética puede dividirse en diversas ramas, entre las que se destacan la ética
normativa (son las teorías que estudia la axiología moral y la deontología, por
ejemplo) y la ética aplicada (se refiere a una parte específica de la realidad,
como la bioética y la ética de las profesiones).
Respecto
a los autores fundamentales en el estudio de la ética, no puede obviarse al
alemán Immanuel Kant, quien reflexionó acerca de cómo organizar las libertades
humanas y de los límites morales. Otros autores que analizaron los principios
éticos fueron Aristóteles, Baruch Spinoza, Jean-Paul Sartre, Michel Foucault,
Friedrich Nietzsche y Albert Camus.
Para nosotras la ética conforma a la moral, y se relaciona con los valores, costumbres y la educación que nos inculcan en el hogar durante nuestro desarrollo.
Nos ayuda a saber que es bueno y malo, que debemos hacer y que no.
La ética guía y regula nuestras acciones y nuestro comportamiento con otros en la sociedad.